Apegado a mi Padre
Apegado a mi Padre por Enrique Monterroza “¡Cuán amables son tus moradas, oh Jehová de los ejércitos! Anhela mi alma y aun ardientemente desea los atrios de Jehová; Mi corazón y mi carne cantan al Dios vivo”. Salmos 84: 1, 2 Mi hijo Uziel ahora tiene casi veinte meses y cada día me sorprende con… Leer más »