por Enrique Monterroza
Muchos de nosotros cantamos más de alguna vez aquella alabanza que es entonada por Jesús Adrián Romero y dice: “Como búfalo, como búfalo, arrollare al enemigo si se enfrenta conmigo, tengo fuerzas del Señor, como Búfalo”. Pero ¿Realmente somos como un búfalo?
En el sur oeste asiático el búfalo es conocido como “el tractor de oriente” debido a la utilización de su fuerza para el trabajo pesado en las tierras. Un búfalo puede llevar cargas hasta un poco más de 2,866 libras, sin duda tiene una fuerza tremenda.
¿Será que nosotros podríamos con 2,866 libras sobre nuestros hombros?, creo que es casi imposible, por no decir imposible.
Lastimosamente nosotros muchas veces somos tan débiles, que con un par de libras de problemas ya queremos tirar la toalla. Todos en algún momento de nuestra vida hemos sentido como nuestras fuerzas decaen, como aquella fortaleza teníamos se fue reduciendo, todo esto quizá por el descuido espiritual que nosotros mismos provocamos.
Los problemas siempre estarán ahí, ya sea para mostrarnos que necesitamos de Dios, para testificar de su Poder o para conocer mas a Dios en sus diferentes esferas, ya sea como un Dios sanador, un Dios proveedor, un Dios Milagroso, etc.
Pero en medio de las debilidades que la vida nos trae o que nosotros mismos propiciamos, es lindo saber que Dios aumentara nuestras fuerzas como las de un búfalo. Muchos de nosotros hemos sido testigos de cómo Dios ha hecho que saquemos fuerzas de donde no las hay, ese es el Dios que conozco, ese es mi Dios, que da fuerzas cuando pareciera que se han acabado.
Es así como Dios cumple su promesa al aumentar nuestras fuerzas y permitir que no importando el peso en libras de los problemas, los podamos superar.
Pero eso no es todo, además de aumentar tus fuerzas y mis fuerzas y compararlas con las de un búfalo, también nos ungirá con aceite fresco.
Sin duda después de la debilidad, viene la fortaleza y con la fortaleza viene el aceite fresco, ese manantial que nos hace anhelar cada día ser fieles a Dios. Que rico es sumergirse en el río del Espíritu de Dios y permitir que toda duda sea disipada, que toda debilidad sea fortalecida.
Hermanos amados, Dios es Fiel en cumplir con su parte, El aumentara tus fuerzas como un búfalo y podrás cargar con todo lo que se te venga encima, no importa que sea, no importa por medio de quien venga, esa situación cargosa no podrá contra la fuerza de búfalo que recibirás de parte del Señor.
Dios quiere ungirnos con aceite fresco cada día para que nuestra relación personal se renueve así como también sus misericordias son nuevas cada mañana, así también el aceite de nuestra vida puede ser fresco y renovado cada día para así tratar la manera de agradarle en TODO.
Escrito en Marzo de 2009 para: http://reflexionesydevocionales.blogspot.com